Cómo creamos productos y trabajamos con nuestros clientes

En Reboot tenemos una opinión fuerte sobre cómo se debería desarrollar producto digital, que es situando a diseño y desarrollo como un todo indivisible durante todo el proceso. Es posible que nuestra visión como anteriores fundadores de una startup de producto pueda estar algo sesgada, pero es la manera que entendemos que es posible crear grandes productos.

Cuando trabajas con clientes esto no siempre es posible, pues muchas veces las distintas áreas del producto están divididas en diferentes proveedores -diseño, desarrollo, marca- o se gestiona parte in-house y parte externalizada. En estos casos es fundamental establecer una buena comunicación desde el inicio para el éxito del proyecto y esto, a diferencia de lo que mucha gente cree, no consiste en tener más reuniones. A veces menos.

En este post queremos contar cuál es nuestro proceso cuando creamos productos y cómo involucramos y nos comunicamos con nuestros clientes.

1. Descubrimiento

En Reboot unimos nuestra experiencia en el diseño y desarrollo de productos digitales a la experiencia y conocimiento de nuestros clientes en su sector. En la primera fase nos detenemos a entender el problema que se quiere resolver, a quién va dirigido y el entorno competitivo del sector.

Esto nos sirve para establecer la dirección a nivel de producto, comprendiendo qué están ofreciendo otros players del mercado y cómo podemos mejorarlo teniendo en cuenta el propósito y la audiencia a la que nos dirigimos.

Asumimos que nuestros clientes ya son expertos en su mercado. Podemos plantearle cuestiones sobre algunas de sus asunciones, pero en ningún caso hacemos un trabajo de validación o investigación de mercado. Cuando nos llega un proyecto en fase anterior al PMF (Product Market Fit), trabajamos en crear un primer MVP que permita validar o descartar la hipótesis de negocio de forma eficiente en tiempo y recursos.

Kickoff

Todos nuestros proyectos arrancan con un Kickoff donde están presentes los principales stakeholders. En esta reunión establecemos los objetivos, un roadmap realista y cómo nos comunicaremos a lo largo del proyecto. En función del tipo de proyecto podremos anticipar el enfoque planteado a nivel de producto -tecnologías, arquitectura, servicios que se utilizarán- y se aprovechará para resolver dudas que puedan surgir.

Investigación

En los siguientes días comenzaremos a investigar paralelamente en:

  • Tecnología. En función de los objetivos y requerimientos establecidos, investigaremos qué tecnología, arquitectura y enfoque se adaptan mejor. Si es necesario utilizar APIs externas o integrarse con servicios existentes veremos cuáles son los límites y cómo podemos trabajar para hacerlos funcionar.
  • Producto. Realizamos un benchmark del entorno competitivo para comprender cómo son y qué ofrecen los productos de la competencia. Esto nos servirá para entender cuál es la expectativa del usuario y como podemos superarla.
  • Esta fase no tiene una duración concreta, siempre dependerá de la magnitud y complejidad del proyecto.

    Propuesta

    Presentamos los resultados de nuestra investigación con una propuesta en firme sobre el stack de desarrollo del producto. Nuestra especialidad es JavaScript y sus frameworks por lo que siempre será una propuesta alineada con nuestro conocimiento, pero nunca descartamos usar nuevas tecnologías si resultan apropiadas para el proyecto o enfoques no-code para MVP o prototipos rápidos.

    2. Producción

    Nos ponemos a trabajar. La fase de producción puede variar enormemente en función del tipo de proyecto. En los proyectos en los que somos responsables del diseño y desarrollo, comenzamos a trabajar en paralelo en ambos.

    Esto sólo resulta posible cuando diseño y desarrollo son uno. De forma que podemos comenzar a construir los fundamentos del producto que no son susceptibles de cambio mientras desde diseño se define la experiencia y la interfaz. La ventaja para el cliente es muy clara: tiempos de producción mucho menores y un lanzamiento más temprano del producto.

    Wireframes

    Definimos la arquitectura más básica del producto y centramos la conversación únicamente en el contenido y su jerarquía. Aquí todavía no hay colores, fuentes u otros elementos gráficos, lo importante es sentar las bases sobre las que se apoyará todo el resto.

    Nuestro proceso de wireframing tiene dos fases:

  • Low Fidelity Wireframe. Es la mínima expresión de la interfaz. Trabajamos únicamente con cajas que representan los distintos tipos de contenido en escala de grises. El objetivo es determinar el contenido y su jerarquía.
  • High Fidelity Wireframe. En esta fase incorporamos los textos y algunos elementos gráficos reconocibles como botones o iconos.
  • Diseño visual

    Una vez hemos validado los wireframes y los copys de la aplicación, comenzamos a trabajar en el diseño visual del producto. De nuevo, esta fase puede variar enormemente en función del punto de partida.

    Si el cliente tiene un branding y unas directrices de marca claras, utilizaremos esto como principal input para el desarrollo del diseño visual. Si se trata de un proyecto completamente nuevo, empleamos diferentes técnicas como el Moodboard, referencias aportadas por el cliente, los valores que se quieren transmitir o el público al que se dirige para generar un diseño visual acorde.

    Esto finalmente se concreta en una Guía de Estilo que incluye la paleta de colores, las fuentes tipográficas y sus usos, iconografía, botones o reglas de espaciado. Esta guía sirve de documentación y referencia a futuro para poder evolucionar el proyecto manteniendo su cohesión.

    Prototipo

    Antes de pasar a desarrollo, creamos un prototipo de la aplicación que compartimos con el cliente para que pueda validar los distintos flujos de usuario en un formato muy cercano al resultado final. Para este tipo de prototipos Figma resulta perfecto. Cuando se trata de prototipos más avanzados que validan no sólo flujos de usuario sino interacciones complejas, utilizamos otro tipo de herramienta como Framer o Principle.

    Desarrollo

    Aunque la fase de desarrollo ocurre en paralelo a las anteriores, únicamente cuando se concreta el diseño visual podemos comenzar la última etapa del desarrollo. Por suerte, al trabajar en paralelo durante todo el proceso, muchas veces únicamente hay que terminar el frontend porque todo el backend e infraestructura ya se ha podido cerrar previamente.

    En todos nuestros proyectos creamos un entorno de pruebas al que damos acceso a nuestros clientes para que puedan testear el producto a medida que lo vamos desarrollando de forma segura.

    3. Lanzamiento

    Cuidamos el lanzamiento del producto como cualquier otra parte del proceso y esto empieza por realizar una buena entrega del proyecto.

    Entrega y formación

    Para nosotros es fundamental entregar un producto que el cliente pueda entender y controlar sin depender de nosotros. No queremos crear jaulas de conocimiento donde el cliente se ve obligado a seguir con nosotros por no quedarle otra alternativa.

    Somos igual de transparentes en la entrega que en cualquier otra parte del proceso. Damos acceso a todo el proyecto: credenciales, servicios, diseño y, por supuesto, el código completo. En la entrega diseñamos una formación para que puedas hacer uso del producto con total independencia, incluso pudiendo evolucionarlo por ti mismo si esa es tu intención.

    Lanzamiento

    Nos quedamos contigo durante el lanzamiento del proyecto para asegurarnos de que todo va bien. Únicamente damos un proyecto por cerrado cuando ha sido correctamente lanzado a producción, se encuentra público y no se ha detectado ningún problema.

    Nuevas oportunidades

    Siempre entendemos el desarrollo de producto como un proceso iterativo que no termina nunca. Por supuesto, seguir trabajando con nosotros depende completamente de ti, tendrás en todo momento el control para poder decidir si quieres continuar con nosotros o buscar un nuevo partner.

    Conclusiones

    Por supuesto, este proceso no está escrito en piedra y puede variar en función del tipo de proyecto. En ocasiones será más corto y se priorizará el tiempo de go-to-market. Otras veces se invertirá más en la investigación y producción del diseño visual. Al final cada proyecto y producto tienen sus propios tempos y contamos con un proceso lo suficientemente flexible para entender esa idiosincrasia.